miércoles, 5 de febrero de 2014

SE ABANDONA DESHACIENDOSE


Se abandona deshaciéndose
lenta, como chocolate derramado
tendiendo al frío
lejos de veranos
de manos
de olvidos.

Solo tu, mi alma.
Solo tu, mi aullido.
Solo tu, mi drama.
Solo tu, mi abrigo.

El mundo es un reflejo
en el espejo
de su habitación
oscura de soles,
luminosa de recuerdos
que son de niebla
sobre piedras y pinos
y no huelen
solo calan sus huesos
que siente dentro
peleando por abandonarla
creando dolor
insistente,
como profesora de mates.

Solo tu, mi alma.
Solo tu, mi aullido.
Solo tu, mi drama.
Solo tu, mi abrigo.

Adora el invierno
que sabe castigo de risas
y de pieles
que se han de tapar
para no helarse.
Fríos que sujetan a los niños
en casa
y a los amantes
en asientos de atrás de coches
que tintan los cristales
con el vaho de sus embestidas.

Solo tu, mi alma.
Solo tu, mi aullido.
Solo tu, mi drama.
Solo tu, mi abrigo.

La vida te vence
con ecos de amores
que dejan arrugadas
tus sabanas
y euros sobre la mesilla
que miras fijamente
intentando explosionarlos.
Bendita mentira
que acude en tu auxilio,
machacas la memoria
con caladas que son delirios
que son amadas
que son lejanas
que duermen
que sangran.

Solo tu, mi alma.
Solo tu, mi aullido.
Solo tu, mi drama.
Solo tu, mi abrigo